Cloud computing, movilidad y analítica marcarán el camino. Para llegar a ello, en primer lugar, los ERP se irán simplificando, tanto su implementación como en su alineación con los procesos de negocio.
La experiencia de usuario también se hará más sencilla y dinámica, con nuevas interfaces más orientadas a los distintos roles y grupos de usuarios. Por ejemplo, para las búsquedas, los Software de Gestión ERP comenzarán a integrar avanzados sistemas de reconocimiento de voz.
Por su parte, los servicios basados en la nube facilitarán una mayor integración con otras clouds y otros sistemas de ERP ya instalados. Así, cada vez más fabricantes comenzarán a ofrecer pequeños módulos o funcionalidades que facilitarán los despliegues de la nube y fomentarán una mayor integración, lo que permitirá a las compañías configurar un puzzle de distintos componentes de múltiples fabricantes, resolviendo mejor su problemática.
Además, los proveedores de Software de Gestión ERP son conscientes del valor de la analítica, que seguirán integrando en sus herramientas para dar un mejor y más rápido acceso a los datos. Estos avances son posibles, entre otras cosas, por el desarrollo de nuevos procesadores ultra rápidos, junto con las bases de datos in-memory que ofrecen una velocidad sin precedentes. Adicionalmente, la analítica predictiva será el siguiente paso a dar, y será altamente valorada.