y datos sin tener que recurrir a consultores externos, con el coste en tiempo y dinero que este hecho conlleva.
No se trata sólo del tiempo y de los recursos, sino de todo lo contrario: cuanto más se tarda en realizar un cambio en una solución de gestión (ERP, Finanzas), mayor es el impacto negativo en la organización, lo que comporta millones y millones en costes ocultos (por ejemplo, pérdidas). El ERP es la espina dorsal de muchas organizaciones y donde éstas se esfuerzan en adaptar sus sistemas a los cambios en el negocio, donde gastarán más de la cuenta (y no sólo en recursos TIC) sin llegar nunca a responder realmente a los requerimientos de negocio”.
La investigación, realizada por Technology Evaluation Centers (TEC), se realizó en base a una encuesta a 307 directivos de diversos sectores de actividad sobre la capacidad de sus soluciones ERP y aplicaciones de negocio para soportar el cambio en el negocio.